Fulgor
13:45:00Fuente |
Tenía el rostro contraído de rabia. La mandíbula apretada, los dedos crispados en torno al gatillo, el cuerpo en tensión. Sus ojos irradiaban fuego desconocido, y te aseguro que Juárez es capaz de quemarlo todo, incluso a sí misma, con tal de olvidar sus pesadillas.
Una bala por cada recuerdo. La pistola se estremecía violentamente.
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