De qué hablo cuando hablo de narrar
3:51:00... Parafraseando a Murakami. Hace poco salí del cine y sin venir a cuento solucioné uno de los grandes problemas del proyecto que tengo ahora entre manos. No sabía qué hacer porque lo concebía como un problema abstracto que se solucionaría a medida que avanzara la trama. Lo que ocurrió fue que en diciembre tuve un parón por cuestiones personales y se alargó indefinidamente. Había intentado retomarlo muchas otras veces, y me sentaba a escribir y no estaba cómoda con la historia. Primero se lo achaqué al estilo (que siempre es mejorable), luego a los personajes y al argumento, ¡a todo! Solo faltaba echarle la culpa a mi perrito por estar cerca cada vez que abría el documento. Incluso intenté seguir a mano, un recurso que utilizo mucho cuando me bloqueo, sin suerte.
El problema era el narrador. Pero veréis, mi forma de escribir se apoya mucho en lo visual. Mis guiones son escaletas donde apunto planos y escenas y no tanto una sucesión de acontecimientos que gira en torno a la idea principal. Así las cosas, cuando yo hablo de la voz narrativa no hablo solo de saber si está en primera o tercera persona, presente o pasado, sino que me imagino una cámara paseando por el lugar de los hechos.
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El cine me vacía mucho la mente; voy siempre que necesito despejarme. Y ahí estaba yo, yendo para casa, cuando me vino la imagen de la voz narrativa adecuada para esta historia:
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A esta clase de reflexiones me enfrento siempre que voy a escribir, no importa la extensión ni la temática (por nombrar dos factores que suelen influir en la estructura interna). Creo que las referencias visuales me vienen dadas por la transmedialidad entre videojuegos, cómics, películas, libros... Y como yo, miles. Normalmente tengo claro el enfoque que quiero darle a cada idea, pero como suele ocurrir en la vida, a veces madurar implica cambiar de punto de vista.
7 comentarios
Lo has clavado, yo estoy en las mismas, prefiero los personajes. Estoy incluso pensando en dejar la trama en un segundo plano y centrarme más en ellos porque es lo que me apetece u.u Tampoco me atrevo a hacer algo coral porque me parece muy complicado y bueno, si faltan cosas por contar ¿siempre se pueden hacer extras? o contar la historia de otros personajes :P
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarPues tenemos procesos de creación muy muy parecidos. Yo también veo las historias, en su inicio, como escenas, y a veces es todo increíblemente "cinematográfico" en mi mente. En cuanto a la elección de perspectiva, también es una duda a la que me enfrento cada vez que tengo un proyecto en mente, pero creo que la historia misma demanda una visión u otra. Cuando dudo, intento dejarme llevar, que sea la historia la que me diga qué visión escoger, y hasta ahora siempre me ha funcionado.
ResponderEliminarEn cuanto a tu pregunta, elijo a los personajes antes que la originalidad. Es lo que tú dices, que permanecen, es como si los hubiéramos conocido, nos han aportado algo y algo de ellos se queda en nosotros :-)
La
ResponderEliminarLa primera persona en particular nunca me termina de convencer, por mas intentos. Y despues de cerrar el libro, sin duda los personajes son los que me hacen volver el.
ResponderEliminarDecisión importante. Y todo depende de la historia, claro. No nos das demasiadas pistas para poder darte un consejo, pero me ha gustado la reflexión. Yo soy, generalmente, de tercera persona, mi último trabajo, ha sido "coral", como tú dices, que no lo había leído: en 3ª, desde el punto de vista de varios personajes, según me interesaba por el argumento.
ResponderEliminarYa nos contarás que hiciste finalmente!
Abrazos!
Chris.
El caso de Canción de hielo y fuego es fascinante. Nunca creí que una series con tantos saltos de puntos de vista me iba a resultar tan atrapante. Debe ser muy complicado de llevar... camisa de ocho varas indeed!
ResponderEliminarP.D. Bastion <3
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